martes, enero 01, 2002

Parece que la sección femenina de Moustros es la única que se mantiene en pie (suele ocurrir). Feliz año a todos. Despedimos al 2001, que se ha llevado consigo no sólo a las torres gemelas, sino cantidad de cosas que no volveremos a ver: el dinero de Gescartera, Bin Laden, y cosillas tan nuestras como las frases "nadie da un duro a 4 pesetas", "eres más falso que un duro de madera" o " la pela es la pela". Desde luego ha habido cosas buenas, como ver a Milosevic por fin sometido a la justicia infinita, o a Carmina Ordóñez por fin libre de malos tratos junto al Chuli, el Pai y el Cabra, y Mar Flores finalmente casada. Grandes errores históricos se van con el 2001, y lo malo es que pueden volver, porque precisamente el descubrimiento del genoma humano y la posibilidad de la clonación humana van a permitirlo: podrán volver a repetirse las cadenas de ADN de los grandes terroristas con complejo de lemmings a los que les estalla la cabeza con apretar un botón, de los grandes demagogos y politicastros indocumentados. Pero bueno, también podrán repetirse nuestras cadenas de ADN y futuras Charos, y futuros Moustros podrán entretenerse siendo testigos de ello.

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