Compañeros de Moustros, ¿tan dura es vuestra cuesta de enero? Empiezo a sentirme solo en esta misión. Bien es verdad que Charo está de baja temporal, porque su preparador le ha doblado el ritmo de temas para que se presente en las próximas oposiciones, para las que deben de quedar sólo un par de meses. Eso el primer examen, que al parecer hay otros dos. La pobre está estudiando todas las horas del día, simplemente todas. Son las desventajas de demostrar que eres una fenómeno que puede con todo.
En mi semana de películas de la tele por cable hoy me ha mantenido despierto El Fantasma del Paraíso, film de 1974 dirigido por Brian de Palma. El resultado fue sorprendente: una psicodélica ópera rock que entremezcla el mito de Fausto, al fantasma de la ópera, una crítica a la industria del rock, e incluso un pequeño homenaje a Hitchcock, quizá el autor que más influyó en la carrera de De Palma. Memorable el espectáculo de los guitarristas cortando brazos y cabezas de muñecos situados entre el público para luego, al modo del doctor Frankenstein, crear a un nuevo dios del rock. Distinta, extraña, a ratos hay que forzarse un poco para mantener la atención, pero necesaria.