El pasado 2 de noviembre murió John P. Roberts, un tipo que a los 24 años -recién licenciado- le dio por meterse en el negocio de la música y organizar un concierto: Woodstock. Y no volvió a invertir en nada relacionado con la música hasta 1994, cuando montó el fracaso de Woodstock II.
Roberts es el personaje del obituario de hoy en El Mundo, artículo diario en las páginas de opinión que suele descubrirme historias de gente muy interesante.
miércoles, noviembre 14, 2001
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario