jueves, febrero 19, 2004

Nos metemos de lleno en la batalla electoral con la banda -la terrorista- buscando asomar la cabeza. Y ahí, todos buscando peces mientras se culpa al otro de revolver el río. Pero vamos a ver, ¿no estaba tan claro que Rajoy iba a arrasar? Pues ya está... que se dejen de monsergas. ¿Que ETA no va a atentar en Cataluña? Mejor. ¿Que Carod -y ERC, que hoy en día es lo mismo- debería salir del Govern? Eso ya lo sabíamos antes del anuncio de esta 'tregua': un partido independentista y uno antiindependentista -creo- no se pueden juntar así como así. Pero el tema de actualidad, la noticia, es el uso electoralista de todo este entuerto. Los de un lado y los de otro se acusan respectivamente de querer aprovecharse de la situación el próximo día 14. Pero vamos a ver, ¿no es inevitable que este tema tenga consecuencias políticas? ETA no son los Latin Kings, no es un problema social de seguridad en nuestras calles. Sus fines son políticos... y ya me he cansado de escribir sobre el tema, que lo único que quería decir es que ya me hastía todo este lío y que no entiendo por qué nadie habla claramente, por qué no admiten nacionalistas y populares -por ejemplo- que todo esto les viene fenomenal para las elecciones aunque ellos no lo han buscado ni deseado -eso espero-, y por qué los medios de comunicación nos despistan tanto, que si escuchas la SER por la mañana y luego ves cualquier telediario puedes acabar sufriendo de esquizofrenia.

Mientras, un hispano nacido en Nueva York -boricua- protagoniza uno de los traspasos más sonados de la historia del deporte. El amigo A-Rod cobrar? hasta 2010 más de 25 millones de dólares al año, en los mismísimos Yankees de su ciudad natal. Lo mejor: que su ex-equipo, Texas, pagará casi 10 de esos 25 anuales, que en total suponen 67 millones de dólares. Es decir, que Texas pagará lo mismo que el Madrid al Barça por Figo... para deshacerse de su jugador. Simplemente para ahorrarse los 16 millones de dólares anuales que ahora le pagarán los Yankees.

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