Por cierto, al loro con la siguiente noticia real:
Compra un coche de 45.000 euros por 9.000
Un error tipográfico permitió a una mujer madrileña adquirir un coche de lujo por 9.000 euros, un 80 por ciento más barato que su precio original, que ascendía a 45.000 euros. La mujer recibió en su domicilio un folleto en el que se ofertaba un coche de lujo por 9.000 euros, por lo que acudió al concesionario para adquirir uno de estos vehículos. Cuando llegó al concesionario los empleados le dijeron que debía tratarse de un error tipográfico en la edición y le respondieron que nadie que conociera mínimamente el mercado podía dar credibilidad a semejante descuento. Ante esta respuesta, la mujer acudió al Instituto Regional de Arbitraje de Consumo, que estableció que el concesionario debía vender el coche por el importe publicitado, ya que al buzoneo de la publicidad errónea no siguió otro avisando del error.
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